¿Quién dijo que a los jóvenes no les interesa la política?
Muchos son los análisis que se pueden realizar después de las elecciones nacionales celebradas el pasado domingo; de hecho en las páginas de ECOS REGIONALES pueden leerse diferentes enfoques sobre lo acontecido el domingo 26 tanto en lo departamental como a nivel de país.
La mayoría de esos análisis surgen, obviamente, a partir de los resultados registrados en esa contienda electoral, pero hay algunos hechos que poco se han destacado en los medios y es la participación de los jóvenes en esta elección. No estamos hablando específicamente de los nuevos votantes que poblaron las calles para concurrir a los distintos circuitos a manifestar su voluntad por determinado candidato, porque eso está establecido por ley y por tanto es obligatorio, sino de aquellos que tomaron parte activa de la campaña, ya sea como candidatos principales, otros ocupando lugares de privilegio en las hojas de votación o integrando los grupos que se dedicaron a la organización de la instancia electoral.
Eso se observó en las sedes partidarias, sin excepción, en todas las agrupaciones que componen el escenario político departamental.
Es un fenómeno que habría que analizar con detenimiento, porque evidentemente contradice lo que se ha dicho siempre, que a la juventud no le interesa la política. Sin embargo lo sucedido en estas campañas electorales iniciadas firmemente a comienzos de este año –aunque algunos se movilizaron con más tiempo- mostró que los jóvenes están creando una muy buena cultura, que es buscar sus propios espacios en una actividad que hace tiempo necesita renovación, de caras y de ideas.
¿Son las viejas dirigencias que están dando más lugar a los muchachos, pensando justamente en propuestas innovadoras? Nos consta que en algunas agrupaciones está esa intención, de mezclar experiencia con juventud, y eso es saludable para la política. Pero también ha jugado un papel muy importante el propio interés de los jóvenes de acercarse a los comités, y a participar directamente de las decisiones que se adoptan en los distintos colectivos, creando sus propios espacios.
Pero esto se dio no solo a nivel de los partidos. En el marco de las elecciones se realizó un plebiscito a través del cual se pretendía efectuar una reforma constitucional, que proponía bajar la edad de imputabilidad penal como elemento central de la propuesta, si bien el contenido iba más allá de ese punto que indudablemente tuvo una mayor visibilidad pública.
Fue allí también donde en Flores se registró la mayor presencia de jóvenes, siendo ellos, básicamente, los que integraron las comisiones –tanto de No a la Baja como Para Vivir en Paz- que trabajaron firmemente en torno a las dos opciones que se pusieron a consideración de la ciudadanía. Incluso, como detalle a destacar, fue a este nivel que se desarrollaron debates, en el tiempo de la recolección de firmas por parte de los propulsores de la iniciativa y ahora, semanas previas a la toma de decisión por parte de la ciudadanía.
Sabido es que el proceso electoral continúa, en noviembre con el balotaje y en mayo del año próximo con las elecciones departamentales. Seguramente la presencia de los jóvenes en esas instancias será importante y entusiasta, si tomamos en cuenta lo acontecido en la campaña previa a las internas y luego de cara al 26 de octubre.
Nos congratulamos que así sea.