REDELSUR, una institución que lucha con dignidad por objetivos y metas posibles
INFORME
EN BUSCA DEL SUEÑO DE LA CASA PROPIA
REDELSUR es una institución que atiende en Trinidad entre 25 y 30 personas discapacitadas -mayores en su mayoría- con diferentes patologías, en el marco de una obra de formación encomiable, digna de ser apoyada por toda la sociedad.
Su sede está ubicada en la zona del Parque Centenario, en la esquina de las calles Antonio J. Caorsi y Juan Zorrilla de San Martín, a escasos metros del Museo Departamental.
Sabido es que los prejuicios, el desinterés, la falta de información, la escasez de centros dedicados a la atención de jóvenes y de personas mayores con discapacidades, hace que muchas veces la comunidad se mantenga un tanto alejada de ese sector de la población. En esas circunstancias es difícil advertir que esas personas son capaces de desarrollar valores, mucho más si todos somos conscientes de la necesidad de su inserción plena en la sociedad.
El trabajo de la Asociación Civil REDELSUR apunta a ese objetivo, con un programa asistido por el Banco de Previsión Social desde el punto de vista financiero, aportando recursos económicos que solo cubren los gastos de alquiler de la sede, de los servicios públicos, de aportes sociales y el pago a algunos profesores. Los recursos, por tanto, no son suficientes para atender a tan importante población, lo que obliga a la institución a apelar a la generosidad de otras entidades públicas y privadas, y a planificar actividades propias que permitan más ingresos para posibilitar un normal funcionamiento de los varios talleres que se dictan en su sede.
REDELSUR recibe el apoyo de la Intendencia que aporta una partida para pagar parte del transporte de los alumnos, y a través de la Oficina de Deporte y la Dirección de Cultura es posible remunerar a los demás docentes.
Los otros recursos económicos –para gastos generales de funcionamiento- surgen de los socios que posee la institución, esperándose que el número crezca con la campaña que se viene realizando en todos los ámbitos de la sociedad. Otra “entrada” es la venta de ravioles y últimamente fondos frescos que ingresaron por concepto de las jornadas cumplidas en el tablado armado en predios de la sede durante los festejos del carnaval.
DESAYUNO Y TALLERES
Las actividades en REDELSUR se desarrollan de lunes a jueves en el horario de 8:30 a 11:30, quedando el último día hábil de la semana para la planificación de tareas, por parte del equipo de docentes que trabajan en REDELSUR bajo la dirección de Adriana Andrada, una vocacional y entusiasta educadora.
Allí se trabaja en la modalidad de talleres, dictándose los mismos en las áreas de Computación, Huerta, Cocina, Educación Física, Teatro, Manualidades, Candombe, Bochas y Deportes Adaptables.
Antes del comienzo de estos talleres, los alumnos -que son trasladados en micro desde sus hogares a REDELSUR- comparten el desayuno. El mismo es complementado por “facturas” donadas por varias panaderías y otras elaboradas en la cocina del establecimiento, aprovechándose la práctica de los participantes en este taller específico.
Para que el desayuno sea servido todos los días se recibe la donación de leche de Granja Roland de Caorsi y los “sólidos” que provienen de las Panaderías de Torena, de Alfaro, de Gulmay y de El Anglo, indistintamente, que se suman con sus donativos a la primera actividad del día en este lugar.
UNA MALA Y OTRA BUENA
Desde hace un tiempo REDELSUR se enfrenta al drama de conseguir un nuevo local para poder funcionar, debido a que el bien que está usufructuando la institución debe ser entregado a su propietaria, por así haberlo determinado.
Una vez informada la dirección de esta situación comenzó la búsqueda de una solución, conscientes que no era fácil encontrar un establecimiento adecuado para el cumplimiento de la delicada misión que tiene REDELSUR en nuestra sociedad.
La donación de un completo equipo de computación por parte del Ministerio de Educación y Cultura, concretado hace algunos meses ante exitosas gestiones de la edila Raquel Umpiérrez, abrió las puertas a la solución que se estaba buscando.
Las computadoras se pusieron en funcionamiento en una de las tantas jornadas, ingresándose en internet tratando de explorar en Ministerios y en otras instituciones, procurando alguna pista que les permitiera lograr información sobre quién podría tener recursos disponibles, a los cuales acceder con la posibilidad de adquirir un bien inmueble que asegurara la continuidad de la obra social que venían desarrollando.
Es así que en la página web de la Dirección Nacional de Cultura del MEC fue localizado el llamado a interesados en participar en el concurso de los Fondos para el Desarrollo de Infraestructuras Culturales en el Interior del país. Era una posibilidad cierta que se abría a los ojos y a la expectativa del ansioso equipo de REDELSUR, por lo que se puso “manos a la obra”.
Infinidad de dificultades se encontraron al momento de completar la solicitud, que incluía datos sobre las características de la institución, el detalle pormenorizado del proyecto a ejecutar en caso de aprobarse los fondos y tres referencias personales, entre otras exigencias. Ahí fue muy importante la tarea de la edila Raquel Umpiérrez, una de las colaboradoras más firmes de REDELSUR, que fue la encargada de conseguir el nombre de las personas encargadas de tutelar el proyecto. Su nombre fue incluido en el formulario de solicitud junto al del Tte. Cnel. José Luis Nogués (en ese momento Comandante de la Unidad Militar con asiento en Trinidad) y el del Senador de la República Luis Rosadilla.
Completada la solicitud fue elevado a la Dirección Nacional de Cultura el proyecto Nuestra Casa, solicitándose fondos por un total de $2:000.000 para utilizarse en la compra y mejoramiento de la infraestructura donde se desarrollan los talleres y demás actividades recreativas y de integración que se despliegan en REDELSUR.
Mientras transcurría el plazo de entrega de las solicitudes, surgió la venta de una casa en la misma zona de Parque Centenario, sobre calle Antonio J. Caorsi, a media cuadra del establecimiento donde se encuentra la actual sede de REDELSUR. No se podía pedir más, solo esperar la aprobación del proyecto para lograr los fondos solicitados.
El compromiso de venta estaba sujeto precisamente a la aprobación del proyecto presentado a la Dirección Nacional de Cultura, quien en esos momentos evaluaba las muchas iniciativas presentadas desde distintos puntos del país.
Cuando se conoció la noticia que el Proyecto No. 66 de REDELSUR titulado Nuestra Casa había sido aprobado, lo que significaba recibir los $ 2:000.000 surgidos del concurso de los Fondos para el Desarrollo de Infraestructuras Culturales en el Interior del país, la alegría y la emoción invadió a todos los integrantes de REDELSUR. La solución está en puerta.
Los recursos que serán entregados en el correr de este mes alcanzarán para adquirir el inmueble y sobrarán unos 10 mil dólares que serán destinados a obras de reparación, pues la casa necesita adecuarse al programa formativo que desarrolla REDELSUR. La edificación cuenta con un terreno de 1.200 metros que permite realizar actividades al aire libre, pero en materia de construcción son necesarios dos salones grandes, dos baños especiales para los alumnos y una cocina abierta. Esos espacios serán habilitados sobre la base de la construcción original.
Los fondos que quedarán disponibles para el reacondicionamiento del bien no serán suficientes, por lo que ya se están planificando beneficios que permitan sumar recursos para lograr la meta en poco tiempo. La sociedad trinitaria se ha caracterizado por ser muy solidaria con obras de esta naturaleza, por lo que es una buena oportunidad para colaborar de distinta forma para, a su vez, reconocer esta obra desplegada por REDELSUR en favor de un sector de la población muchas veces olvidado y relegado de las prioridades de los gobernantes.
LEYENDA
La casa que adquirirá REDELSUR con los $2:000.000 que se otorgarán por parte de los Fondos para el Desarrollo de Infraestructuras Culturales en el Interior del país.