“Nunca cambié; soy consciente que volveré a ser la vecina de calle Fondar que anda todos los días en bicicleta”
ENTREVISTA
CON LA INTENDENTA DE FLORES Mtra. BEATRIZ RÍOS INGOLD A POCO MENOS DE UN MES DE FINALIZAR SU GESTIÓN
Cuando falta menos de un mes para dejar el cargo de Intendenta, Beatriz Ríos Ingold fue entrevistada por ECOS REGIONALES para conocer los resultados de esa experiencia de un año de duración, inédita en nuestro departamento. Algunas preguntas de carácter personal y muchas más sobre la gestión fueron respondidas por esta Maestra que, a pesar de no estar activa, se valió de su vocación para encarar lo que ha sido seguramente el mayor desafío de su vida, pues en sus decisiones estuvo gran parte del destino del departamento de Flores, con todo lo que ello significa. Beatriz Ríos atendió en su despacho comunal a ECOS REGIONALES y distendida contestó y hasta disfrutó con algunas interrogantes formuladas.
-¿Cómo ha sido este período como titular del ejecutivo comunal?
-Creo que ha sido un período de trabajo más bien hacia adentro. Con Laura (Burgoa, actual Secretaria General de la Intendencia), compañera de ruta en este último tramo, nos impusimos seguir con las metas trazadas por Armando (Castaingdebat) y el equipo. En ese sentido el objetivo fue terminar con las obras que ya estaban empezadas, avizorando que se venían tiempos difíciles por lo que había que poner la casa en orden. Ya había pasado el tiempo de bonanza y había que hacer algunos recortes, proceder con más autoridad.
No ha sido un trabajo fácil, más bien ha sido un trabajo titánico, porque en primera instancia a veces los Directores y Asesores no entendían o no llegaban a dimensionar el alcance de las medidas que les estábamos pidiendo. Pero además, a veces, quedaban demostradas algunas carencias en cuanto a lo que era un trabajo eficiente, pero todo se fue corrigiendo.
El mayor orgullo para nosotros es tener el mismo nivel de aceptación, cosa que vimos en las encuestas que se realizaron en las instancias electorales. Era un desafío grande, un compromiso enorme, pero pudimos mantener la aceptación que tenía Armando.
-¿Qué particularidad tiene el cargo de Intendente ejercido por una mujer?
-A nosotros se nos redoblan las tareas. Me imagino que a Armando también, tenía su actividad privada por lo que tenía que atender el campo y sus negocios, pero nosotros tenemos que atender la familia, el hogar… En ese sentido no tenemos tanta libertad o disponibilidad de tiempo como para estar en todo lo que queremos estar, pero lo hemos hecho con sacrificio sabiendo que la función es por un año.
El compromiso que asumimos el 25 de julio del año pasado era estar a la altura de las circunstancias. El trabajo no nos asusta y así lo hemos encarado.
-¿En qué te ha ayudado el hecho de ser docente a la hora de cumplir con ese compromiso?
-Varias personas han hecho mención a esa condición. El ser docente te permite escuchar a la gente, estar permanentemente atento a los emergentes. En una clase hay que estar constantemente atento a todos los alumnos, si marchan al ritmo que corresponde sabiendo que es un conjunto de personas distintas, que no todos son iguales. Ese es un aspecto importante para manejar equipos.
El trabajo en equipo es el más difícil porque ahí hay que ser muy respetuoso de las individualidades; es un trabajo que solamente el que ha sido docente lo puede llevar adelante. De todos modos Armando sin ser docente fue muy amplio, dando libertad al equipo, que es lo que se necesita.
Cuando uno trabaja en equipo tiene que dar cierta libertad para dejar librado el hacer a la creatividad y las decisiones que puede adoptar cada Director.
-¿Cómo eras como Maestra? ¿Qué carácter tenías?
-Los alumnos decían que yo hablaba muy fuerte. Siempre fui una persona de hablar fuerte, lograba captar la atención de los chiquilines, siendo el mayor regocijo a fin de año cuando la despedida con los padres agradecidos.
Creo haber dejado una buena huella en el magisterio, y no es por hacer alarde de eso. Además tuve las mayores calificaciones, pero eso fue después de la dictadura porque previamente me venían bajando el hacha.
-¿Esa característica de hablar fuerte y frontalmente la has aplicado en la Intendencia?
Sí, si… saben que sí. En eso soy un elefante en un bazar. Toda la vida hablé de frente y pretendo que conmigo se haga lo mismo, que cuando esté equivocada me lo digan.
En las reuniones de equipo trataba de decir las cosas sin nominar, sin indicar a quién iba dirigido, pero que cada uno se pusiera el sayo.
-¿Cuál es la reacción que experimentan los integrantes del equipo de gobierno frente a esa forma de ser, propia de tu personalidad?
-No sé. Ha sido una gran incógnita que hemos tenido con Laura, si no nos entendían lo que pretendíamos o realmente no habían asumido el compromiso total que tiene que asumirse.
Justamente esa es una de las cosas que le estamos sugiriendo a Fernando (Echeverría, Intendente electo), que cuando designe y hable con sus Directores cada uno tendría que firmar un compromiso de trabajo.
-¿Cómo Intendenta estás informada de todo lo que pasa en la Intendencia?
-Tratamos de estar en todo, o mejor dicho, debemos estar en todo. No fue muy difícil mi caso porque ya estuve ejerciendo la Secretaría General y Armando siempre hizo uso de licencia, dándome la oportunidad en cada una de esas circunstancias participar en los Congreso de Intendentes, que es otra de las cosas que hay que manejar, saber dónde golpear puertas a la hora de pelear los proyectos. No es fácil pero un pre aprendizaje había, pero el desafío de estar todos los días y acostarse con la responsabilidad de saber que estás manejando toda una sociedad a veces me desvelaba.
-¿Qué es lo que generalmente te plantean los vecinos en la calle, cuando te ven haciendo los “deberes” de la casa?
-En ese sentido seguí haciendo las mismas cosas, la misma rutina y al supermercado voy con una libretita y una birome porque sé que los vecinos te plantean por lo general, que tal foco no prende en tal esquina o que hay un pozo en tal calle. Como que a un determinado nivel de población el ABC sigue siendo el cumplir bien la función específica de la Intendencia. Capaz que esa es una de las cosas que en futuras administraciones hay que tratar de revertir.
Quiero decir que aspiro a que el vecino pueda ver otras cosas, que puede haber otro despegar del departamento que no sea solo por cumplir con esas necesidades que entiendo que son básicas, que es con lo que tiene que cumplir la Intendencia, pero la propia dinámica hace que te lleven por otro camino.
-¿Cómo se explica eso?
-Quiero decir, por ejemplo, a raíz de la granizada que sufrimos tuvimos que reparar 150 viviendas, para lo cual solamente nos ofrecieron mil chapas. Esos fueron dineros que no estaban previstos en el presupuesto, que estaban en un “colchón” destinados para obras y hubo que invertirlos en eso. Permanentemente surgen emergentes; el vecino que no se vio afectado por el granizo reclama que le tapen el pozo que tiene al frente de su casa.
-¿Tú crees en una Intendencia más allá de los servicios específicos?
-Sí, porque creo que son generadores del desarrollo local. No hay dudas, el gobierno no puede tener tantos tentáculos, generar tanta infraestructura para sostener políticas que están bien, pero tienen que apoyarse en las Intendencias, no hay otra…
-En ese marco se suele pedir a la Intendencia inversiones para la generación de fuentes de trabajo y contar con políticas de vivienda, por ejemplo. ¿Cómo hace la Intendencia para satisfacer esas demandas?
-Permanentemente tratamos de golpear puertas. En el caso de las inversiones es muy difícil que una empresa venga a instalarse en un departamento del centro del país, sin costa cerca, sin aeropuerto, sin vías de comunicación accesibles. Obviamente que seguimos buscando y si vienen emprendimientos pequeños, bienvenidos sean. Ahora estamos con una propuesta en ese sentido, pero no la queremos anunciar porque después abortan esos proyectos y nos exponemos a repetir antecedentes ya conocidos en el departamento.
Generalmente el privado tiene que valerse de capitales que lo apoyen, y el que tiene capital lo va a colocar en algo que realmente sea seguro, que dé rentabilidad.
En cuanto al tema vivienda, si bien en este último período se han tenido varios programas con el Ministerio de Vivienda, Ordenamiento Territorial y Medio Ambiente, todavía es insuficiente. Lo único que podemos hacer ahora es solucionar una emergencia, pero la Intendencia no está capacitada para construir una vivienda, ni está dentro de las potestades del gobierno departamental.
-Sin embargo Flores se las ha ingeniado para buscar su desarrollo por otro lado, ¿el turismo puede ser un ejemplo?, y en ese caso tú tienes mucho que ver con ese tema.
-Cuando asumimos Cultura en el año 2005 teníamos una obsesión. Nos preguntábamos, ¿por qué nosotros no podemos desarrollar un turismo cultural? En esos diálogos con distintos equipos veíamos que lo fundamental para eso era capacitar a la gente, y sabíamos que era difícil pero se logró. Esas son de las satisfacciones más lindas que uno tiene después de terminar un período de diez años; ver que un proyecto germinó, creció y ahora está dando frutos. Eso está bueno pero necesitamos el compromiso de los que siguen y de la población para que esto se siga desarrollando.
-También tu compromiso como ciudadana de este departamento, porque en esto estamos todos involucrados. ¿Es así?
-Exactamente. Todos tenemos que ver con esto. Como docente soy una fanática de la educación y siempre dije que nosotros tenemos una conciencia ecológica, porque hace décadas impulsamos aquel proyecto del Grito a Flores que formó parte de secuencias que se fueron dando, que se fueron desarrollando y se fueron aplicando. Tuvo mucho que ver que apuntáramos a los niños y a los jóvenes, y pienso que en eso tenemos que seguir en la misma línea. Ellos van a ser los futuros ciudadanos dentro de diez años y capaz que son de las cosas que hay que incorporar al gran proyecto. Es mi sugerencia y como tal la asumo personalmente, no es que esté imponiendo nada pero tal vez lo que hay que conseguir es un equipo docente bueno, que tenga llegada con los chicos porque hay que trabajar tránsito, geoparque y medio ambiente.
Creo que con un lindo proyecto se puede llegar a las autoridades de la Educación.
Ya hemos generado cosas dentro de la Educación, porque en eso Armando fue un visionario cuando se hizo en Trinidad la reunión de evaluación de Educación en la que estaban todas las autoridades, y dijo: Con diagnósticos no podemos seguir, vamos a cambiar. En esa oportunidad se crearon tres comisiones que dieron sus resultados.
No le veo otra salida al tema.
-Hace unos días estuvo en nuestra ciudad Esteban Costa orientando un Taller sobre Turismo y en una entrevista con ECOS REGIONALES sostuvo que el Geoparque necesita más difusión de su propuesta turística, porque se conoce muy poco. ¿Estás de acuerdo con esa apreciación?
-Sí, obviamente que lo vemos así. Lo que nos está faltando, aunque el año pasado lo trabajamos bastante, es coordinación con los Ministerios. Ya se incorporó el Ministerio de Turismo, el Ministerio de Industria y Minería y el Ministerio de Vivienda, Ordenamiento Territorial y Medio Ambiente, llegando a hacerse en conjunto un borrador de convenio pero se detuvo ante el cambio de autoridades.
Pensamos que por ahí pasa la proyección del Geoparque, pero además tenemos mucha esperanza en el Presidente de la República que en la carta que dejó dirigida al departamento dio prioridad al desarrollo de este emprendimiento.
Creemos que por ahí viene el despegue de Flores.
-¿Cómo nos están viendo desde la UNESCO?
-El Lic. Diego Irazábal participó recientemente en una actividad cumplida en México y allí quedaron muy impactados con la gestión que estamos llevando a cabo. Tratamos de sistematizar todos los pasos que se han dado considerando que en la región tenemos varios proyectos de Geoparque, y así poder asesorar en ese sentido.
Pensamos que donde aparezcan dos o tres Geoparques más en América y se pueda crear la Red, va a haber otro despegue.
No hay que olvidarse que la gente del primer mundo busca el turismo natural y esa puede ser una buena oferta. Pero eso va asociado con servicios y conciencia en la población.
-Al comienzo de la entrevista planteabas los objetivos de tu administración, que era terminar con los proyectos que están en marcha. ¿Se va a cumplir con ese objetivo o ello depende de la economía de la Intendencia?
-Depende de la economía; nos hemos frenado por esta situación, por esa luz amarilla que hay en el país, donde tanto el Presidente como el Ministro de Economía están pidiendo austeridad, lo mismo que las autoridades de la OPP.
Nosotros veíamos que eso se venía, lo notábamos por la recaudación, por lo que veníamos tomando medidas de austeridad.
En realidad el único proyecto que queda en marcha es el de la Terminal, los demás todos han finalizado, mientras tenemos en carpeta y pronta a salir la ampliación de obras en Barrio Peñarol y la construcción de un Salón Comunal en Barrio Ribot. Con eso vamos a cumplir.
Fernando (Echeverría) piensa que probablemente tenga que solicitar un préstamo para la Terminal; yo esperaría porque me parece que si se sigue con las medidas de austeridad se puede llegar bien. Pero en definitiva eso lo definirá él.
Una de las cosas que queremos es darle tranquilidad a los funcionarios que el dinero de los sueldos está previsto, de la misma manera que están previstos los recursos para hacer frente a los compromisos contraídos con los proveedores.
-¿Ha venido disminuyendo tan notoriamente la recaudación como para encender una luz de alerta?
-No es tanta la disminución, pero ha sido tema de la campaña electoral, al punto tal que terminó la campaña y nos siguen “dando”. Hay algo que la gente ya se olvidó que fue la granizada, a raíz de lo cual tuvimos que reparar 150 viviendas como ya lo mencioné. Tuvimos que arreglar el techo y acondicionar el Teatro Artigas; tuvimos que hacer lo mismo con el Cine Plaza y con el Comedor 71. Ahí invertimos dos millones y medio de dólares que es lo que nos está faltando para estar tranquilos, para que el nuevo Intendente pudiera comenzar su gestión haciendo obras. Pero bueno, fueron obras imprevistas y había que hacerlas.
Por suerte que el Cine está dando los resultados esperados y la gente ya se olvidó de que eso estuvo abandonado, que nos golpeaban la puerta y nos criticaban que no arreglábamos ese centro cultural.
-¿Han sido duras las medidas que han tenido que adoptarse a nivel interno de la Intendencia?
-Tratamos de adoptar medidas destinadas a controlar el tema gastos. Si bien permanentemente en estos diez años el Contador decía que los Directores y Asesores no son ordenadores de gastos, siempre alguna cosa se escapaba. En ese sentido duplicamos el trabajo con Laura, pero dijimos que todas las órdenes tenían que pasar por nosotros y luego de ser analizadas íbamos a decir que si o que no.
Por ejemplo, en lo que se gasta en forma impresionante es en reparación de maquinaria. A pesar de tener maquinaria nueva, todos los días hay algo para arreglar, algo para reparar.
La maquinaria china no ha sido lo ideal que se pensaba. Si bien se podían comprar tres por el valor de una de otra marca, la verdad que creo que no fue esa una buena inversión. En ese sentido estamos las Intendencias en las mismas condiciones, todas estamos con problemas con la maquinaria nueva. Pero hay otro problema, que la producción de los repuestos es discontinuada lo que obliga a hacerlos especialmente, por lo que no habrá de aceptarse más maquinaria china, o se va a exigir otra calidad.
En cuanto a la recaudación, hay una alerta también en cuanto a Contribución Rural, porque la Federación Rural en estos momentos está pidiendo al gobierno nacional prorrogar los vencimientos a fin de año, para ver si pueden pasar el invierno y ver de qué manera solucionan la economía.
Se viene una crisis importante en el agro que repercute en todas las ciudades.
-¿Cómo se desglosa la recaudación por tributos y otros conceptos?
-La recaudación por Contribución Rural es el 10% del presupuesto y un 1% de la Contribución Urbana, el 40% son de partidas nacionales y 35% de patente de rodados.
-¿Ese 35% por concepto de patentes se mantendrá en el futuro?
-Son de las cosas que se van a negociar. Con los reempadronamientos se nos fue un buen número de vehículos, ingresaron también pero como hubo actualización en alguna franja mucho no es la pérdida que tenemos.
En ese sentido seguimos con una recaudación fuera de serie, porque también se hablaba que habíamos perdido mucho. En el 2005 recaudamos 43 millones de pesos, el año pasado recaudamos 244 millones de pesos y este año vamos a estar en 220 millones de pesos de acuerdo a la proyección.
En las negociaciones a llevarse a cabo, Flores va a solicitar que el piso sea el del año 2014.
-Falta un mes para dejar el cargo de Intendenta, si fueras la Maestra Directora, ¿cuál sería la calificación que darías a cada Departamento de la Intendencia? ¿Cuál sería el más destacado y cuál el que tiene que rendir más?
-Esa respuesta me la voy a reservar para el nuevo Intendente. Hace poco los embromaba a los Directores diciéndoles que iba a dar la nota final, pero todavía no he hecho el boletín de calificaciones…
-¿Cuál sería la sugerencia principal que darías a tu sucesor Fernando Echeverría?
-Que es importante escuchar a la gente, hay que tener una paciencia especial. Los vecinos vienen a demandar hasta las cosas más insólitas porque creen que la Intendencia tiene obligación de asumir algunas cosas, y hay que tener mucha paciencia para explicarles cuáles son las funciones nuestras, que es manejar recursos de toda la población y no pueden ir para determinadas personas.
Muchas veces piden audiencia con el Intendente y el tema es en Hacienda, resolviendo el problema en el mostrador.
En eso él (Fernando Echeverría) va a tener que tener mucha paciencia, mucha tranquilidad al momento de definir, no es recomendable tomar decisiones en forma instantánea, sino que es mejor que esas decisiones pasen por la almohada por lo menos una noche y que las tome al otro día.
Fundamentalmente eso, y espíritu de trabajo que sé que lo tiene. En ese sentido no tengo dudas que es un trabajador muy responsable y que va a hacer todo con la mayor transparencia.
-¿Cómo te han visto tus familiares y amigos ejerciendo este cargo? ¿Cuántas críticas y cuántos elogios te han hecho?
-No sé si es porque me quieren, pero no me han criticado o me critican poco. A veces se preocupan por determinado comentario, para saber si es así o no es así. Mis amigas se sienten orgullosas… tengo un grupo de amigas muy unido desde la época de estudios y nos alegramos mucho con los logros de cada una.
-¿Por qué ejerciste el cargo de Intendente con un notorio bajo perfil, cuando tenías la posibilidad de actuar con más visibilidad pública?
-Porque es mi estilo. Nunca fui alguien que salió a buscar cámaras o micrófonos. Ese propósito me lo hice, de no cambiar, seguir siendo la misma persona porque soy consciente que volveré a ser la vecina de calle Fondar que anda todos los días en bicicleta por las calles de la ciudad.
Otro propósito que me hice fue que durante mi mandato no iba a mirar televisión, no iba a escuchar radios ni leer periódicos.
-¿Ese propósito se cumplió?
-No, a veces leía, pero trataba de informarme a través de los títulos para no agregar más carga a la función, pero a veces la crítica era positiva llegando gente a decirme que tal cosa podía hacerla de una forma u otra. Soy una agradecida de eso.
-¿Cuáles son las sensaciones que sientes a un mes de dejar el más alto cargo político al que puede aspirar una persona a nivel departamental?
-Mi conciencia está tranquila porque dimos todo lo que podíamos dar. La sensación pasa por ahí, además del cansancio que provoca esta función. Estoy deseando poder descansar, tomarme unos días y después ver qué seguimos haciendo. No me veo quieta en mi casa; ya me pasó cuando me jubilé de la educación pública y pensé que iba a descansar, a disfrutar de la estufa y del mate, pero a los tres meses caminaba por las paredes. No quiero que me vuelva a pasar eso.
-¿Si el Intendente electo te invitara a integrar el nuevo equipo de gobierno qué le dirías?
-Lo pensaría y pondría algunas condiciones, porque realmente me gustaría trabajar con un equipo atrás.