Una oportunidad que debe aprovecharse
El anuncio de la visita a Trinidad de las autoridades de la enseñanza, más concretamente del Presidente del CODICEN Wilson Netto, nos estimula a pensar sobre los proyectos que tiene el departamento de Flores y que no han podido aún concretarse por varios motivos, por falta de recursos y por imperio de una burocracia que sigue debilitando muchas iniciativas de bien común.
En Flores, por ejemplo, la Escuela Agraria de Trinidad y la Escuela La Carolina siguen esperando la cristalización de nuevas especializaciones agropecuarias, las que ya fueron planteadas hace bastante tiempo. A eso se agrega el proyecto edilicio del primero de estos centros, que tenía la intención de transformarse en un Instituto Regional para algunas capacitaciones específicas.
Netto es un hombre que conoce el tema por provenir de la Universidad del Trabajo del Uruguay, y ha sido un gran luchador para que los centros de esta rama de la enseñanza dejen de ser la cenicienta y se transformen en una puerta grande hacia la inserción laboral de los jóvenes, para lo cual necesitan propuestas modernas, adecuadas a los nuevos tiempos.
Por otro lado, han quedado por el camino convenios vinculados al funcionamiento del gimnasio del Liceo de Villa Ismael Cortinas, un centro que aspira a constituirse en un centro regional de gran envergadura, pero para ello es preciso definir aspectos que tienen que ver con el traslado de los estudiantes.
Esos temas están esperando una definición, y son las autoridades de la enseñanza las que tienen la llave para encarar esas soluciones.
Otro de los grandes temas es el Liceo Nro. 3 para la ciudad de Trinidad, una de los anhelos más sentidos por la comunidad educativa del departamento.
El asunto no es nuevo, pero no por tener su tiempo deja de tener vigencia. Es más, cada día que pasa es una prioridad mayor, porque la superpoblación del Liceo Departamental Nro. 1, que es el que absorbe el mayor número de alumnos, hace que sea insostenible esa situación.
Fueron los docentes que hace unos años presentaron el proyecto, el cual estuvo sostenido por un relevamiento prolijo y contundente, con un detallado análisis que surge de esa consulta a la ciudadanía, pero ahora tiene que ser toda la sociedad la que debe sumarse a esa iniciativa para sensibilizar a las autoridades nacionales y departamentales sobre esta realidad que rompe los ojos.
Sabemos de la disposición que existe del gobierno local en cuanto a colaborar con un terreno para la construcción del Liceo Nro. 3, como sucedió en Ismael Cortinas, pero a la prueba está que las decisiones sobre el tema de fondo se toman en otros ámbitos.
Es ahí donde la burocracia comienza a incidir, postergando resoluciones que deberían haberse tomado mucho antes.
Pero como somos conscientes de la pesadez del Estado, debemos ser pacientes, no obstante, eso no puede significar de ninguna manera bajar los brazos y dejar todo a expensas de la voluntad de burócratas que muy pocas veces miran hacia el Interior, menos cuando se trata de aprobar recursos económicos para proyectos de esta envergadura.
Estos son los temas que tienen que ser causa común de los porongueros, y plantearlos directamente cuando se da la oportunidad, como en este caso.