Ante un grave problema, una urgente solución
Una preocupación generalizada se ha instalado en nuestra sociedad, ante el problema que se registra en el Hospital “Dr. Edison Camacho” de Trinidad, dependiente de la Administración de Servicios de Salud del Estado (ASSE) que, ante la falta de recursos humanos en la especialidad de pediatría, está teniendo que derivar a niños a ser atendidos o ser internados en centros de salud de Paysandú, Montevideo o Florida.
En la presente edición de hoy se informa sobre esta problemática, y lo expresado por las fuentes consultadas sería suficiente para entender lo que está sucediendo, pero es necesario reflexionar sobre las responsabilidades a las que están sometidos los prestadores de salud, en el marco de un Sistema Nacional Integrado de Salud que propicia la complementación de servicios, nunca más necesaria en este caso.
No se trata de echar culpas a unos u otros, pero es necesario admitir que algo grave está sucediendo para el cumplimiento de uno de los principios básicos de la reforma de la salud hace varios años implementada.
Creemos que ha llegado el momento de dejar diferencias personales, empresariales o de cualquier otro tipo a un lado, para colocar por encima de eso el interés común, que son los usuarios de la salud.
La situación que está atravesando el Hospital local y la imposibilidad de solucionar con urgencia el grave problema –porque la propia burocracia de un llamado público a profesionales así lo determina- deja al descubierto que el Sistema Nacional Integrado de Salud tiene en Flores un agujero, por el cual se están escapando contenidos que tienen que ver con la integración, precisamente. O complementación, para decirlo en términos más exactos, que como todo lo demás forma parte fundamental de un sistema que necesita de todas las piezas bien ajustadas para poder funcionar correctamente.
El solo hecho de pensar que los niños que necesitan asistencia médica en ASSE deben ser trasladados a otro lugar del país, recorrer unos 200 quilómetros para ser atendidos por un pediatra, da mucha pena porque el problema original se multiplica. Como se ha dicho, se distorsiona el contexto familiar porque padre o madre generalmente son los que viajan con sus hijos, con lo que ello implica también en lo económico.
Las propias autoridades de ASSE han recordado que es en los hospitales que de ella dependen, donde se atiende la gente más vulnerable. Si tomamos en cuenta ese aspecto, imaginemos cuánto se complica el tener que internar a un niño en un centro hospitalario de otro departamento, sea por el tiempo que sea.
Lo detallado no hace más que estimular la búsqueda urgente de una solución. Una solución que a nuestro juicio está por el lado de colocar en su exacto lugar a todas las piezas con las que se construyó el Sistema Nacional Integrado de Salud.
En pocas palabras, la ejecución en todos sus términos del SNIS es la solución. Más nada se necesita, sino la voluntad de asumir las responsabilidades que corresponden a los prestadores de salud.