El adiós a uno de los comercios más antiguos y característicos de Trinidad

SASTRERÍA BENVENUTO

El pasado 31 de octubre de 2017 cerró la Sastrería Benvenuto, uno de los tres comercios más antiguos de Trinidad (de ellos ahora sobreviven el de Estefan, 1880, y la Empresa Listur, 1902).

Sobre la Sastrería Benvenuto, que con distintos nombres estuvo en manos de tres generaciones de una misma familia, su último titular, José “Pepe” Benvenuto, recordó a ECOS REGIONALES que “mi abuelo se inició en 1901, en la esquina de Fondar y Treinta y Tres, donde actualmente está la ‘Casa de la Goma’, de ahí se trasladó a la calle Fondar, donde actualmente están las ‘Grandes Tiendas Montevideo’. Mi abuelo era propietario de ese local y estando ahí adquirió la esquina de Fondar y Gral. Flores, donde estuvo el comercio hasta su cierre”.

Historió “Pepe” que la firma comercial comenzó con José María Benvenuto, “que era mi abuelo, cuando falleció muy joven, en el año 1929, pasó a ser ‘Sucesores de José María Benvenuto’ , a posteriori le pusieron ‘Benvenuto Hnos.’, que era mi padre con dos hermanos. Después quedó mi padre solo, Manlio R. Benvenuto, y después, cuando él decidió jubilarse, mi padre me vendió el activo y el pasivo de la empresa, y ahí quedó el nombre mío, José Manlio Benvenuto; cuando estaba donde hoy está ‘La Casa de la Goma’ supongo que sería también una empresa unipersonal, el dueño era mi abuelo”.

En sus comienzos en la Sastrería, “Pepe” Benvenuto rememora que “hacía un poco de todo, de mensajero, trabajaba en el taller, atendía al público, porque ya era sastrería y tienda, mi padre en la década del 40 empezó a traer ropa, a vender camisas, pantalones, zapatos, y sombreros, los sombreros siempre se trajeron, hasta que decidió jubilarse y quedé yo solo; antes de jubilarse mi padre ya traíamos trajes de confección, en lo que yo me especialicé es en darles terminación y como acá prácticamente nadie se ocupaba de traer trajes, yo siempre vendía trajes , se solucionaba rápido el tema”.

El funcionamiento del comercio, cuando quedé yo solo, fue siempre igual: vender todo tipo de ropa para hombres fue la especialidad, tanto de mis tíos, de mi padre y de mi abuelo, cuando mi abuelo era solamente sastrería”.

“Yo lo único que puedo decir es que estuve con el comercio desde 1952- 53 hasta el 31 de octubre de 2017, fueron 60 y pico de años que no me pesan, yo pasaba entretenido en el comercio”, reflexionó “Pepe” Benvenuto.

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